Para la Mamá más amorosa y valiente del mundo.

¡Querida mamá!
Desde que tengo memoria, siempre has sido tú la que me enseñó el verdadero significado del amor. En cada abrazo, en cada consejo y en cada sonrisa tuya, he encontrado un refugio cálido y reconfortante. No hay palabras suficientes para describir cuánto te admiro y te quiero.
Tu valentía es un faro en mi vida. A través de dificultades y desafíos, has demostrado una fuerza inquebrantable, una capacidad de lucha que solo alguien con un corazón tan grande como el tuyo puede tener. Cuando era niño y temía la oscuridad, tú encendías una luz con tu abrazo y con tu voz suave que susurraba cuentos de hadas y sueños llenos de esperanza.
Las noches en vela, las lágrimas escondidas y los sacrificios silenciosos son testimonio de tu incansable amor. No hay desafío demasiado grande, ni problema sin solución cuando te tengo al lado. Me mostraste que la verdadera valentía reside en amar sin límites, en dar sin esperar nada a cambio y en proteger a los que amas con toda tu alma.
¡Gracias, mamá, por ser el pilar y el refugio, por tu amor incondicional que me nutre y me inspira cada día! Eres la mamá más amorosa y valiente del mundo y por eso, siempre llevarás la corona en mi corazón. ¡Te quiero más de lo que las palabras pueden expresar! ❤️

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